Vuelven a evacuar el reactor 3 de Fukushima por nuevo humo negro
Esta es la segunda vez en dos días que asciende humo de color oscuro del dañado reactor 3. La unidad 3 es las más peligrosa porque funciona con una mezcla de uranio y plutonio muy contaminante.
Una nueva columna de humoprocedente del reactor 3 de la central nuclear de Fukushima, ha provocado la evacuación de los trabajadores que se encuentran trabajando en las tareas de mantenimiento, según informa la agencia de noticias Kyodo. Sin embargo, según esta misma agencia, el humo ha empezado a disiparse de manera gradual.
Según TEPCO, la compañía eléctrica de Tokio, aún se desconocen las causas que han provocado el humo de color grisáceo. Aún así, la cadena de televisión japonesa NHK ha informado de que no se observan llamas procedentes del reactor. Además, se ha informado de que la radiación en Fukushima 2 horas antes de la aparición del humo era de 435 microsieverts y que poco antes de ser vista la humareda, la radiación había bajado a 283,7 microsieverts. Las autoridades aseguran que no existen razones para ampliar la zona de evacuación alrededor de la central nuclear.
Esta es la segunda vez en dos días que asciende humo de color oscuro del dañado reactor 3, lo que indica, según los expertos consultados por la cadena NHK, que no se trata de vapor de agua. La unidad 3 es una de las más peligrosas porque funciona con una mezcla de uranio y plutonio muy contaminante.
Durante la noche de este martes, los operarios de la central consiguieron devolver la electricidad al panel de control de la unidad, lo que permitiría iniciar ciertas funciones internas y medir la temperatura y presión de la instalación.
Mientras tanto, el problema sigue siendo la radiación en las aguas y los alimentos en todo Japón. El Gobierno nipón informó durante la madrugada española de que había encontrado radiación en una depuradora de Tokio, al tiempo que Estados Unidos anunciaba restricciones a productos como verduras o leche de hasta cuatro prefecturas japonesas.
La situación en Fukushima, reactor a reactor (OIEA) Reactor 1. El agua del sistema de refrigeración cubre sólo hasta la mitad de las barras de combustible, que se cree dañadas. No hay indicios de que la vasija de contención esté deteriorada. El sistema de refrigeración del reactor está seriamente averiado y sin suministro eléctrico. La emergencia está en el nivel 5 de 7 en la Escala Internacional Nuclear y de Sucesos Radiológicos (INES). Se sigue bombeando agua de mar para reducir la temperatura.
Reactor 2. Las barras de combustible nuclear sólo están sumergidas en agua hasta la mitad. Se cree que el núcleo y el combustible nuclear han sufrido daños y que la vasija no está totalmente intacta. Se han producido emisiones de humo y vapor, y elevadas dosis de radiación. El sistema de refrigeración está tan dañado como en la unidad 1. La temperatura del agua en la piscina sigue muy por encima de los normales 25 grados, aunque está estabilizada entre los 49 y 53 grados. Japón ha situado en 5 el grado de emergencia en este reactor.
Reactor 3. Sistema de refrigeración averiado, bajo nivel de agua en el reactor, daños en el combustible nuclear en el reactor e incertidumbre sobre la situación en el estanque de combustible. Una explosión destrozó la cubierta exterior del edificio. Columnas de humo blanco y gris fueron observadas los días 19 y 20 de marzo. Esas emisiones fueron acompañadas de subidas en los niveles de radiactividad. Se ha vertido agua desde helicópteros y desde camiones cisternas para enfriar las instalaciones. Grado 5 en la escala INES.
Reactor 4. La piscina de combustible usado es el principal problema, ya que poco antes del terremoto se trasladó aquí todo el combustible del reactor. Se ha rociado el edificio con agua y el día 22 comenzó a bombearse agua a un ritmo de 50 toneladas por hora, con la intención de mantener esa operación durante tres horas. No hay datos precisos sobre el avance en los esfuerzos para reactivar el suministro eléctrico.
Reactores 5 y 6. Estas unidades estaban desactivadas cuando se produjo el seísmo, por lo que el generalizado corte de suministro eléctrico no ha tenido un efecto tan grave. Ambas unidades disponen ahora de suministro eléctrico y están en modo seguro, con temperatura y presión bajas en el reactor.
Reactor 2. Las barras de combustible nuclear sólo están sumergidas en agua hasta la mitad. Se cree que el núcleo y el combustible nuclear han sufrido daños y que la vasija no está totalmente intacta. Se han producido emisiones de humo y vapor, y elevadas dosis de radiación. El sistema de refrigeración está tan dañado como en la unidad 1. La temperatura del agua en la piscina sigue muy por encima de los normales 25 grados, aunque está estabilizada entre los 49 y 53 grados. Japón ha situado en 5 el grado de emergencia en este reactor.
Reactor 3. Sistema de refrigeración averiado, bajo nivel de agua en el reactor, daños en el combustible nuclear en el reactor e incertidumbre sobre la situación en el estanque de combustible. Una explosión destrozó la cubierta exterior del edificio. Columnas de humo blanco y gris fueron observadas los días 19 y 20 de marzo. Esas emisiones fueron acompañadas de subidas en los niveles de radiactividad. Se ha vertido agua desde helicópteros y desde camiones cisternas para enfriar las instalaciones. Grado 5 en la escala INES.
Reactor 4. La piscina de combustible usado es el principal problema, ya que poco antes del terremoto se trasladó aquí todo el combustible del reactor. Se ha rociado el edificio con agua y el día 22 comenzó a bombearse agua a un ritmo de 50 toneladas por hora, con la intención de mantener esa operación durante tres horas. No hay datos precisos sobre el avance en los esfuerzos para reactivar el suministro eléctrico.
Reactores 5 y 6. Estas unidades estaban desactivadas cuando se produjo el seísmo, por lo que el generalizado corte de suministro eléctrico no ha tenido un efecto tan grave. Ambas unidades disponen ahora de suministro eléctrico y están en modo seguro, con temperatura y presión bajas en el reactor.
La radiación en el agua de Tokio duplica el nivel permitido para niños
Las autoridades recomiendan que los niños no beban agua del grifo tras detectarse ciertos niveles de radiación en el agua corriente de Tokio. La radiación detectada afecta tanto a la capital japonesa como a cinco distritos suburbanos.
Concretamente, se ha detectado una concentración de yodo de 210 bequerelios por litro en muestras de agua del grifo, cuando el límite fijado por las autoridades japonesas es de 100 bequerelios por litro para bebés. En el caso de los adultos, el límite es de 300 bequerelios por litro, según el Ministerio japonés de Educación y Ciencia.
El pasado sábado, el Gobierno nipón reconoció que se habían detectado indicios de yodo radiactivo en el agua de Tokio y sus alrededores, aunque en niveles por debajo del límite legal.
Un funcionario del Gobierno metropolitano de la capital de Japón subrayó que las autoridades están aconsejando que no se proporcione agua a bebés y niños pequeños, debido a que la radiación detectada supera los límites establecidos para ellos, un dato difundido con anterioridad por la televisión pública NHK.
La recomendación realizada por el Gobierno metropolitano afecta a 23 barrios del centro de la capital y a otros cinco distritos vecinos, Musashino, Machida, Tama, Mitaka e Inagi.
El alcalde de Tokio, Shintaro Ishihara, ha pedido "calma" y "sensatez" a la población de la capital japonesa ante esta recomendación y ha señalado que el consumo de agua del grifo es seguro entre los adultos. Ishihara indicó que las autoridades sanitarias están midiendo la calidad del agua de Tokio de forma constante.
Mientras, los ingenieros siguen luchando para enfriar los reactores de la planta nuclear de Fukushima, seriamente afectada por el terremoto y el posterior tsunami del pasado 11 de marzo, e intentan mantener bajo control la posible contaminación de los alimentos y el agua.
Pese a que este martes se logró hacer llegar cables de energía a los reactores, las tareas tuvieron que ser suspendidas al comprobar que la temperatura del reactor número 1 había alcanzado los 400º C. Además, Hidehiko Nishiyama, portavoz del Consejo de Seguridad Nuclear e Industrial, informó de que en la turbina del reactor 2 se han hallado altos niveles de radiación, hasta los 500 milisievert por hora, lo que está impidiendo continuar con el trabajo.
Contaminación en alimentos Durante las últimas horas se ha informado de que se ha registrado un incremento en el nivel de radiación en alimentos como la leche o verduras de hoja verdeprocedentes de las inmediaciones de la planta afectada, según ha reconocido el Gobierno japonés.
El primer ministro nipón, Naoto Kan, pidió a las autoridades de Fukushima que prohíban la distribución y consumo de hasta 11 tipos de verduras de esa provincia, entre ellos espinacas, brócoli, repollo o nabo, como medida de precaución.
El Gobierno ha encontrado asimismo niveles excesivamente altos de radiación en la leche de la vecina provincia de Ibaraki, más al sur. Ante la alarma creada por el temor una contaminación alimentaria, el Ejecutivo ha pedido a seis provincias japonesas que vigilen los niveles de radiación de sus productos agrícolas.
Por su parte, la Administración de Alimentos y Drogas de EEUU (FDA, por sus siglas en inglés) ha anunciado que el paíssuspenderá sus importaciones de leche, productos lácteos, frutas y hortalizas procedentes de las prefecturas japonesas de Fukushima, Ibaraki, Tochigi y Gunma, por su radiación.
Nuevo terremoto Además, los temblores se siguen sucediendo en Japón. Un terremoto de magnitud 6 ha sacudido este miércoles el noreste de Japón, cerca de la central nuclear de Fukushima, sin que se hayan producido daños personales, según informa la Agencia Meteorológica nipona.
Esta es una réplica más de las muchas que se han producido desde el pasado 11 de marzo, cuando un seísmo de nueve grados azotó la costa noreste. Hasta el momento, el balance de víctimas habla de 9.079 muertos y 12.645 desaparecidos
Las autoridades recomiendan que los niños no beban agua del grifo tras detectarse ciertos niveles de radiación en el agua corriente de Tokio. La radiación detectada afecta tanto a la capital japonesa como a cinco distritos suburbanos.
Concretamente, se ha detectado una concentración de yodo de 210 bequerelios por litro en muestras de agua del grifo, cuando el límite fijado por las autoridades japonesas es de 100 bequerelios por litro para bebés. En el caso de los adultos, el límite es de 300 bequerelios por litro, según el Ministerio japonés de Educación y Ciencia.
El pasado sábado, el Gobierno nipón reconoció que se habían detectado indicios de yodo radiactivo en el agua de Tokio y sus alrededores, aunque en niveles por debajo del límite legal.
Un funcionario del Gobierno metropolitano de la capital de Japón subrayó que las autoridades están aconsejando que no se proporcione agua a bebés y niños pequeños, debido a que la radiación detectada supera los límites establecidos para ellos, un dato difundido con anterioridad por la televisión pública NHK.
La recomendación realizada por el Gobierno metropolitano afecta a 23 barrios del centro de la capital y a otros cinco distritos vecinos, Musashino, Machida, Tama, Mitaka e Inagi.
El alcalde de Tokio, Shintaro Ishihara, ha pedido "calma" y "sensatez" a la población de la capital japonesa ante esta recomendación y ha señalado que el consumo de agua del grifo es seguro entre los adultos. Ishihara indicó que las autoridades sanitarias están midiendo la calidad del agua de Tokio de forma constante.
Mientras, los ingenieros siguen luchando para enfriar los reactores de la planta nuclear de Fukushima, seriamente afectada por el terremoto y el posterior tsunami del pasado 11 de marzo, e intentan mantener bajo control la posible contaminación de los alimentos y el agua.
Pese a que este martes se logró hacer llegar cables de energía a los reactores, las tareas tuvieron que ser suspendidas al comprobar que la temperatura del reactor número 1 había alcanzado los 400º C. Además, Hidehiko Nishiyama, portavoz del Consejo de Seguridad Nuclear e Industrial, informó de que en la turbina del reactor 2 se han hallado altos niveles de radiación, hasta los 500 milisievert por hora, lo que está impidiendo continuar con el trabajo.
Contaminación en alimentos Durante las últimas horas se ha informado de que se ha registrado un incremento en el nivel de radiación en alimentos como la leche o verduras de hoja verdeprocedentes de las inmediaciones de la planta afectada, según ha reconocido el Gobierno japonés.
El primer ministro nipón, Naoto Kan, pidió a las autoridades de Fukushima que prohíban la distribución y consumo de hasta 11 tipos de verduras de esa provincia, entre ellos espinacas, brócoli, repollo o nabo, como medida de precaución.
El Gobierno ha encontrado asimismo niveles excesivamente altos de radiación en la leche de la vecina provincia de Ibaraki, más al sur. Ante la alarma creada por el temor una contaminación alimentaria, el Ejecutivo ha pedido a seis provincias japonesas que vigilen los niveles de radiación de sus productos agrícolas.
Por su parte, la Administración de Alimentos y Drogas de EEUU (FDA, por sus siglas en inglés) ha anunciado que el paíssuspenderá sus importaciones de leche, productos lácteos, frutas y hortalizas procedentes de las prefecturas japonesas de Fukushima, Ibaraki, Tochigi y Gunma, por su radiación.
Nuevo terremoto Además, los temblores se siguen sucediendo en Japón. Un terremoto de magnitud 6 ha sacudido este miércoles el noreste de Japón, cerca de la central nuclear de Fukushima, sin que se hayan producido daños personales, según informa la Agencia Meteorológica nipona.
Esta es una réplica más de las muchas que se han producido desde el pasado 11 de marzo, cuando un seísmo de nueve grados azotó la costa noreste. Hasta el momento, el balance de víctimas habla de 9.079 muertos y 12.645 desaparecidos
No hay comentarios:
Publicar un comentario